Por Arnold Enns
No les hablé ni les prediqué con palabras sabias y elocuentes…para que la fe de ustedes no dependiera de la sabiduría humana, sino del poder de Dios
1 Corintios 2:4-5
La mayoría de las personas en el mundo no tienen ni idea de lo que realmente creen. Vivimos con una mezcolanza confusa de visiones del mundo. Algunos se guían por el materialismo, otros están dominados por el hedonismo y otros más se rigen por el pragmatismo.
Nuestro mundo necesita seguidores de Cristo que puedan explicar fehacientemente y con convicción su fe. Es más Dios espera que sepas no solo lo que crees sino también por qué lo crees. He aquí tres pautas para fortalecer nuestras convicciones.
Aprende la verdad: Pregúntale a alguien “¿Qué es la verdad?” y de seguro que iniciarás una conversación interesante. Para algunos, la verdad es subjetiva. Pero la verdad es la autoexpresión de Dios. En Juan 17:17 dice “Santifícalos en tu verdad; tu palabra es verdad”.
La verdad solo existe en Dios. Por ello si estaré hablando de la verdad tengo que basarme en Su palabra. Todo argumento humano queda corto si no tiene como base la palabra de Dios.
Filtrar lo que vemos, escuchamos y leemos: Si lo que vemos en la televisión, las películas y las redes sociales contradice lo que dice Dios, corremos el peligro de ser influenciados por esas voces. En Colosenses 2:8 dice “No permitan que nadie los atrape con filosofías huecas y disparates elocuentes, que nacen del pensamiento humano y de los poderes espirituales de este mundo y no de Cristo”.
Es posible que no nos demos cuenta de lo que hemos absorbido hasta que nos encontremos pensando o hablando de manera diferente.
Discernir y confrontar lo que es falso: No todo el que habla de Dios viene en el nombre de Dios. Hay muchos predicadores y charlatanes mentirosos sueltos en el mundo. En 2 Pedro 2:1 dice “Habrá falsos maestros entre ustedes. Ellos les enseñarán con astucia herejías destructivas y hasta negarán al Señor”.
Entiende que tu fe no está destinada a ser privada. Quedarse callado cuando uno sabe y conoce la verdad es ser cómplice de la falsedad. Debes estar dispuesto a discernir y enfrentar este desafío con la verdad en el amor de Cristo.
CONCEPTO IMPORTANTE
Es absurdo querer debatir y argumentar el concepto de la verdad si no se tiene como base la palabra de Dios, porque la verdad solo existe en Dios. El Diablo es el padre de la mentira. Por lo tanto, debo de conocer y aferrarme a la palabra de Dios para asegurarme de caminar en la verdad.
Todo lo que veo, escucho y leo afecta lo que creo. Debo de poner filtros a lo que ingresa en mi mente. Pues de la abundancia de mi corazón hablara mi boca.
Habiendo aprendido la verdad podemos rechazar la falsedad y el error. En el mundo veremos y escucharemos muchas falsedades. Te animo a estar atento y alerta para reconocer lo que es falso, luego rechazarlo y finalmente denunciarlo.
MOTIVO DE ORACION
Señor Jesús hoy vengo delante de ti para pedirte que me llenes de tu palabra de verdad. Ayúdame a discernir lo que es falso. Dame el coraje para enfrentar la mentira y ayudar a otros a tener una relación contigo.