Fíjense la coincidencia que existe, entre el nombre de DaVID, uno de los personajes bíblicos ejemplo de Fe y guerrero por excelencia, amado por Dios y las tres últimas letras del nombre dado al nuevo Coronavirus, CoVID-19; y esta semejanza no es más que una señal de Dios para advertirnos de usar la misma fe que tuvo David ante Goliat para enfrentar la situación de Pandemia Mundial que atravesamos y salir victoriosos de ella.
Actualmente la humanidad entera está siendo asediada por el Covid-19, el cual se ha levantado con todo su arsenal y poderío mortífero contra quienes habitamos este planeta Tierra; el mismo se presenta como un paladín similar al que enfrentó David, aquel Goliat, del que habla Primera de Samuel 17, que causaba temor a los moradores de Israel, por su peligrosidad y actitud desafiante; dice la biblia que hasta el Rey Saúl le temía: «…Oyendo Saúl y todo Israel estas palabras, se turbaron y tuvieron gran miedo…» Primera de Samuel 17:11.
Es así que, el CoVID-19 ha logrado infundir gran miedo y temor tanto a presidentes, miembros de la realeza, del clero, artistas, deportistas, figuras públicas, como a todas y todos los seres humanos en general, al igual que Goliat lo hacía con el pueblo de Israel.
En la época del pasaje bíblico, Goliat generaba miedo por su gran tamaño y por la armadura de la cual estaba revestido, nadie se atrevía a enfrentarlo. Hoy día nadie se atreve a enfrentar al CoVID-19, sino que más bien se han tomado hasta ahora, solo medidas para prevenir su contagio, cómo lo son, usar mascarillas, guantes, gel antibacterial, lavado de manos y el quedarse en casa, así como la cuarentena; respecto a esta última medida de prevención, Goliat mantuvo al pueblo de Israel en una especie de Cuarentena, tal como escrito está en Primera de Samuel capítulo 17:16: “…Venía, pues, aquel filisteo por la mañana y por la tarde, y así lo hizo por cuarenta días…” ¿Vemos así que Goliat, persistió en su actitud desafiante contra el pueblo de Israel por “cuarenta días” dato curioso este, no les parece?
Ahora bien, que actitud debe tener en la actualidad el pueblo de Dios ante el Goliat de hoy, ¿el CoVID-19? La respuesta no es otra que, asumir la actitud que tuvo el valiente David, el cual se despojó de todo miedo o temor, tomando como armas para combatir a su adversario, en primer lugar, su Fe en el Dios viviente. Él no miró para el tamaño de su contrincante, ni para el armamento, ni a su vestidura. David no miró tampoco para las medidas de prevención, pues el Rey Saúl procuró dotarlo de ropas especiales, un casco y armarlo con una coraza, pero David rechazó todo eso, es como decir que hoy día, él hubiera rechazado salir a la calle con mascarilla, tapabocas, o guantes, etc.
En segundo lugar, David no miró para sus condiciones físicas comparadas con las de Goliat; hasta el punto que ni Goliat ni el Rey Saúl lograron amedrentarlo; el Rey le dijo, que: «eres un muchacho y el un hombre de guerra desde su juventud….» Asimismo, el pasaje bíblico señala que Goliat cuando miró a David lo tuvo en poco porque era muchacho, y rubio, y de hermoso parecer. David no sé amilanó ante su adversario y a pesar del armamento que tenía el filisteo (espada y jabalina) lo venció con tan solo usar una honda y una piedra.
Vemos que la Fe con la que actuó David para enfrentar a Goliat, no estaba fundada en sus condiciones físicas, pues de ser así jamás hubiera podido derrotar al gigante, sino que la misma, estaba fundada en la profunda convicción y certeza de que el Dios viviente le daría la victoria, no viendo para las circunstancias que lo rodeaban sino hacia la fe que brotaba de su interior. Esa fe y convicción de David estaba fundada también en la certeza de la fidelidad de Dios, pues seguro estaba que el Señor siempre lo acompañaba en sus batallas.
Así amigos, somos los David de este tiempo de Pandemia y nuestro Dios es el mismo, ayer, hoy y por los siglos de los siglos, y de la misma manera que estuvo con David en su lucha contra Goliat, lo estará con nosotros en el combate que enfrentamos contra el actual Goliat, el Covid-19; al cual debemos resistir no solo tomando las medidas de prevención prescritas por las autoridades gubernamentales, sino principalmente, desechando el miedo, estando firmes en la FE SOBRENATURAL, en la CONFIANZA y FIDELIDAD de nuestro Dios, pudiendo hoy día, ante el asedio del CoVID-19, declarar como lo hizo David, a viva voz en oración: «…El Señor que me ha librado de las garras del león y de las garras del oso, él también me librará de la mano de este filisteo…» (Primera de Samuel 17:37) AMÉN.
Fuente. Elglobonews.net –
Reflexión por la Dra. Luisa Ruiz