“Presten atención, ustedes que dicen: «Hoy o mañana iremos a tal o cual ciudad y nos quedaremos un año. Haremos negocios allí y ganaremos dinero»”
Santiago 4:13
Queremos saber qué sucederá mañana, próximo año, la próxima década. Estamos preocupados por el futuro. Es sorprendente cómo la gente intenta todo tipo de cosas diferentes para tratar de predecir el futuro: astrología, lectura de las manos, seminarios, estudio de profecías y tiempos Bíblicos, etc.
¿Qué hay de malo con todo esto? La Biblia también habla mucho sobre planificación. Sin embargo, la Biblia dice que hay 3 errores que cometemos y que debemos tener en cuenta al pensar en el futuro.
Planificar sin Dios: La Biblia habla de planificación y dice que es bueno hacer planes. En Lucas 14:28 dice “Porque ¿quién de vosotros, queriendo edificar una torre, no se sienta primero y calcula los gastos, a ver si tiene lo que necesita para acabarla?” Pero hacer planes sin Dios es catastrófico.
¿Te has dado cuenta de que incluso los mejores planes a menudo fracasan? Lo más sabio es decir lo que dice en Santiago 4:15 “Si el Señor quiere, viviremos y haremos esto o aquello”. La vida es solo un gran “Si es que”. No sé qué va a pasar mañana, tú tampoco y por ello planificar sin Dios es peligroso.
Pensar que soy dueño del mañana: Nos encanta anunciar y declarar nuestros planes y metas. Pero en Santiago 4:14,16 dice “¿Cómo saben qué será de su vida el día de mañana?… Están haciendo alarde de sus propios planes pretenciosos, y semejante jactancia es maligna.”
Hay un par de razones por las que no debemos creernos dueño del futuro. En primer lugar, la vida es impredecible y en segundo lugar la vida es breve. Tenga cuidado y no presuma que tiene el resto de su vida.
Dejar de hacer el bien: Haber tomado la decisión de pedirle a Dios por su voluntad y luego no hacer caso a esto tiene consecuencias. En Santiago 4:17 dice “Recuerden que es pecado saber lo que se debe hacer y luego no hacerlo”. Hay pecados de comisión. Pero también hay pecados de omisión. Nos encanta posponer, inclusive el hacer planes.
CONCEPTO IMPORTANTE
Es triste conocer a alguien que dice: “No creo en Dios. No creo que Él exista”. Pero es más triste encontrar a alguien que dice: “Creo que Él existe”, pero luego actúa como si Él no existiera a la hora de hacer planes para el futuro.
Los cristianos durante cientos de años solían escribir las iniciales “D.V.” al final de sus cartas. Firmaban con su nombre y luego escribían D.V. que en latín significa “Deo Valente” – “Si Dios quiere”.
Pensar en el futuro puede ser abrumador, pero afortunadamente se presenta en pedazos pequeños, un segmento de 24 horas a la vez. No puedo vivir el futuro, solo puedo vivir el día de hoy. Por ello planifica para el futuro, pero aprovecha el presente para hacer el bien.
MOTIVO DE ORACION
Señor Jesús hoy vengo delante de ti para pedirte perdón por no tenerte en cuenta para los planes de mi futuro. Hoy vengo a consultar contigo y pedirte dirección para vivir de acuerdo a tus planes y propósitos.
Por Arnold Enns